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El Supremo absuelve a un soldado gay que desertó al no soportar el acoso homófobo
La Sala de lo Militar del Tribunal Supremo ha absuelto a un soldado gay que abandonó su destino en el Ejército tras sufrir acoso y malos tratos parte de sus compañeros debido a su orientación sexual. La sala ha considerado probado que presentaba miedo insuperable a reincorporarse a su puesto de trabajo. Un tribunal militar lo había condenado previamente a tres meses y un día de prisión, pese a admitir la “fuerte e intolerable hostilidad” que sufría, al no considerar que el miedo justificara su deserción.
El soldado se ausentó de su destino en mayo de 2006 sin permiso de sus superiores, permaneciendo en paradero desconocido hasta que fue detenido meses después. Tras regresar a su destino tuvo que acogerse a una baja médica por motivo psicológicos, y finalmente fue juzgado por un tribunal militar.
Desde dos manzanas trasladamos nuestra solidaridad al joven y deseamos que se reponga psicológicamente. También nos preguntamos si en algún momento se han exigido responsabilidades a los compañeros que lo acosaron y a los mandos que lo toleraron, información que no aparece reflejada en los medios.
La Sala de lo Militar del Tribunal Supremo ha absuelto a un soldado gay que abandonó su destino en el Ejército tras sufrir acoso y malos tratos parte de sus compañeros debido a su orientación sexual. La sala ha considerado probado que presentaba miedo insuperable a reincorporarse a su puesto de trabajo. Un tribunal militar lo había condenado previamente a tres meses y un día de prisión, pese a admitir la “fuerte e intolerable hostilidad” que sufría, al no considerar que el miedo justificara su deserción.
El soldado se ausentó de su destino en mayo de 2006 sin permiso de sus superiores, permaneciendo en paradero desconocido hasta que fue detenido meses después. Tras regresar a su destino tuvo que acogerse a una baja médica por motivo psicológicos, y finalmente fue juzgado por un tribunal militar.
Desde dos manzanas trasladamos nuestra solidaridad al joven y deseamos que se reponga psicológicamente. También nos preguntamos si en algún momento se han exigido responsabilidades a los compañeros que lo acosaron y a los mandos que lo toleraron, información que no aparece reflejada en los medios.
