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Ben Amics reclama medidas contra la exclusión laboral de las personas transexuales con motivo del 1 de Mayo
- La precariedad, el paro y el acoso en el trabajo son algunos de los problemas que dificultan la plena integración de este colectivo
Ben Amics, la Asociación Lesbiana, Gay, Transexual y Bisexual de las Islas Baleares, con motivo de la celebración del 1 de Mayo, Día Internacional del Trabajo, reclama medidas efectivas contra la grave situación de exclusión laboral que sufren las mujeres y hombres transexuales y que sitúa a este colectivo como el más afectado por la precariedad, el paro y el acoso en el trabajo.
Dentro del actual contexto de crisis económica, con datos alarmantes de desempleo, las personas transexuales necesitan un esfuerzo extraordinario por parte de las administraciones y de los agentes sociales con el fin de conseguir avances en su plena integración laboral y social. La Unión Europea ya advirtió que las mujeres transexuales representan uno de los colectivos con mayor riesgo de exclusión y pobreza.
Algunos de los aspectos que causan esta exclusión laboral son la carencia de formación inicial o no completada, el desconocimiento de las herramientas para la búsqueda de empleo, el miedo escénico (por ejemplo ante una entrevista de trabajo), los estereotipos en el imaginario cultural de las personas transexuales y también la incongruencia entre el aspecto físico y los datos del DNI.
Las mujeres transexuales, que pasan menos desapercibidas en la sociedad, son rechazadas en casi cualquier profesión y algunas no ven otra salida que dedicarse al mundo del espectáculo o la prostitución para sobrevivir. El estereotipo que vincula la realidad transexual y el trabajo sexual está asumido incluso dentro del colectivo transexual (aunque la realidad nos dice que existen otras ocupaciones al margen del trabajo sexual aunque no sin dificultades).
Según datos aportados por el Parlamento Europeo, en 1989 más del 60% de las mujeres transexuales de todo el continente ejercía la prostitución. Este índice era todavía mayor en España. Actualmente, la prostitución la ejerce una minoría de las mujeres transexuales españolas y alrededor del 90% son de origen latinoamericano. La fuerte exclusión del mercado laboral y la inexistencia de itinerarios especialmente adaptados a sus necesidades específicas por parte de la administración, explican por qué muchas mujeres transexuales eligen el trabajo sexual como forma de subsistencia.
Dentro del grupo de mujeres transexuales que son trabajadoras sexuales, un buen porcentaje han tomado su decisión por libre opción o por mejorar sus ingresos económicos, ante la comparación salarial con otras actividades económicas. También hay un sector sin formación, sin alternativas de inserción, que acaba en esta ocupación. En cualquier caso, es imprescindible que existan programas de inserción laboral para que ninguna mujer se vea obligada, por el contexto que sea, a ejercer la prostitución en contra de su voluntad.
En el caso de las personas que sí consiguen encontrar un trabajo, en muchas ocasiones acaban enfrentándose al acoso de compañeros y compañeras del trabajo que incluso puede desembocar en el abandono debido a la presión, burlas e insultos... es decir la transfobia.
- La precariedad, el paro y el acoso en el trabajo son algunos de los problemas que dificultan la plena integración de este colectivo
Ben Amics, la Asociación Lesbiana, Gay, Transexual y Bisexual de las Islas Baleares, con motivo de la celebración del 1 de Mayo, Día Internacional del Trabajo, reclama medidas efectivas contra la grave situación de exclusión laboral que sufren las mujeres y hombres transexuales y que sitúa a este colectivo como el más afectado por la precariedad, el paro y el acoso en el trabajo.
Dentro del actual contexto de crisis económica, con datos alarmantes de desempleo, las personas transexuales necesitan un esfuerzo extraordinario por parte de las administraciones y de los agentes sociales con el fin de conseguir avances en su plena integración laboral y social. La Unión Europea ya advirtió que las mujeres transexuales representan uno de los colectivos con mayor riesgo de exclusión y pobreza.
Algunos de los aspectos que causan esta exclusión laboral son la carencia de formación inicial o no completada, el desconocimiento de las herramientas para la búsqueda de empleo, el miedo escénico (por ejemplo ante una entrevista de trabajo), los estereotipos en el imaginario cultural de las personas transexuales y también la incongruencia entre el aspecto físico y los datos del DNI.
Las mujeres transexuales, que pasan menos desapercibidas en la sociedad, son rechazadas en casi cualquier profesión y algunas no ven otra salida que dedicarse al mundo del espectáculo o la prostitución para sobrevivir. El estereotipo que vincula la realidad transexual y el trabajo sexual está asumido incluso dentro del colectivo transexual (aunque la realidad nos dice que existen otras ocupaciones al margen del trabajo sexual aunque no sin dificultades).
Según datos aportados por el Parlamento Europeo, en 1989 más del 60% de las mujeres transexuales de todo el continente ejercía la prostitución. Este índice era todavía mayor en España. Actualmente, la prostitución la ejerce una minoría de las mujeres transexuales españolas y alrededor del 90% son de origen latinoamericano. La fuerte exclusión del mercado laboral y la inexistencia de itinerarios especialmente adaptados a sus necesidades específicas por parte de la administración, explican por qué muchas mujeres transexuales eligen el trabajo sexual como forma de subsistencia.
Dentro del grupo de mujeres transexuales que son trabajadoras sexuales, un buen porcentaje han tomado su decisión por libre opción o por mejorar sus ingresos económicos, ante la comparación salarial con otras actividades económicas. También hay un sector sin formación, sin alternativas de inserción, que acaba en esta ocupación. En cualquier caso, es imprescindible que existan programas de inserción laboral para que ninguna mujer se vea obligada, por el contexto que sea, a ejercer la prostitución en contra de su voluntad.
En el caso de las personas que sí consiguen encontrar un trabajo, en muchas ocasiones acaban enfrentándose al acoso de compañeros y compañeras del trabajo que incluso puede desembocar en el abandono debido a la presión, burlas e insultos... es decir la transfobia.
