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Fuente:lavanguardia.es
El PSC acepta retoques de ERC a la ordenanza del civismo
Queda eliminada la sanción a quienes vomiten en la calle y se mantienen algunas discrepancias en torno a la regulación de la prostitución
RAMON SUÑÉ - 05/11/2005
BARCELONA
Las negociaciones en torno a la ordenanza de civismo de Barcelona avanzan a buen ritmo. Los socialistas han aceptado ya algunos retoques al borrador presentado hace unas semanas por su concejal Assumpta Escarp y, aunque se mantienen todavía discrepancias de cierto calado a la hora de abordar fenómenos como el de la prostitución, todo parece indicar que el grupo de ERC es el que está más cerca de alcanzar un amplio acuerdo con la formación que lidera el alcalde Joan Clos.
Jordi Portabella y su compañera de grupo Pilar Vallugera presentaron ayer en rueda de prensa el medio centenar de alegaciones formuladas por los republicanos al anteproyecto de ordenanza. Su tono distó mucho del empleado la semana pasada por la dirigente de ICV, Imma Mayol. De hecho, Iniciativa, que llegó a acusar a los socialistas de introducir "criterios morales neoconservadores" en la ordenanza, hizo público ayer mismo un comunicado en el que reitera su posición, anuncia la presentación de cerca de ochenta alegaciones y mantiene su exigencia de suprimir de la ordenanza toda referencia a la prostitución y la mendicidad social.
A pesar de todo, fuentes socialistas se mostraron convencidas de que antes de que la comisión de Presidencia debata la aprobación inicial de la ordenanza, el acuerdo con ERC e ICV, e incluso con la oposición - preferentemente con CiU- será más que suficiente.
De momento, Portabella anunció algunas modificaciones que ya han sido aceptadas por el grupo mayoritario. Entre ellas figuran la supresión de la prohibición, y el correspondiente castigo a quienes vomiten en la calle, la prohibición genérica de distribución de octavillas o colocación de pancartas en los balcones y la obligación de que los organizadores de cualquier acto público en la calle depositen una fianza para cubrir los daños que pudieran cometerse. Este precepto se mantendrá, por ejemplo, para los promotores privados de conciertos al aire libre, pero no se aplicará a los organizadores de una manifestación.
Por lo que respecta a la mendicidad es muy probable que los socialistas acaben aceptando la introducción de modificaciones en el borrador inicial. La prohibición podría circunscribirse a la mendicidad "organizada, agresiva y violenta", lo que incluiría la persecución de los limpiavidrios.En cambio es casi seguro que de la ordenanza desaparecerá la posibilidad de que la Guardia Urbana obligue a las personas que ejercen las formas más clásicas de mendicidad a abandonar la calle contra su voluntad.
La regulación de la prostitución sigue siendo el mayor escollo para un acuerdo que difícilmente será total, ya que se puede dar el caso de que un grupo, aun votando afirmativamente la aprobación de la ordenanza en su conjunto, se abstenga o vote en contra de algún capítulo. ERC propone limitar la prohibición de la prostitución a aquellos lugares situados en una radio inferior de 200 metros de los centros escolares. Se trataría de aplicar una norma similar a la que rige la concesión de licencias para sex-shops. ERC también está de acuerdo en que no se tolere que prostitutas y clientes realicen actos sexuales en la calle.
En materia de prostitución y de mendicidad, con independencia de que se alcance o no un acuerdo, los tres grupos del gobierno, e incluso los de la oposición, coinciden en que más importante y efectivas que las prohibiciones - tajantes o con matizaciones- será reforzar los circuitos de atención social y reinserción laboral de quienes ejercen estas actividades.
El PSC acepta retoques de ERC a la ordenanza del civismo
Queda eliminada la sanción a quienes vomiten en la calle y se mantienen algunas discrepancias en torno a la regulación de la prostitución
RAMON SUÑÉ - 05/11/2005
BARCELONA
Las negociaciones en torno a la ordenanza de civismo de Barcelona avanzan a buen ritmo. Los socialistas han aceptado ya algunos retoques al borrador presentado hace unas semanas por su concejal Assumpta Escarp y, aunque se mantienen todavía discrepancias de cierto calado a la hora de abordar fenómenos como el de la prostitución, todo parece indicar que el grupo de ERC es el que está más cerca de alcanzar un amplio acuerdo con la formación que lidera el alcalde Joan Clos.
Jordi Portabella y su compañera de grupo Pilar Vallugera presentaron ayer en rueda de prensa el medio centenar de alegaciones formuladas por los republicanos al anteproyecto de ordenanza. Su tono distó mucho del empleado la semana pasada por la dirigente de ICV, Imma Mayol. De hecho, Iniciativa, que llegó a acusar a los socialistas de introducir "criterios morales neoconservadores" en la ordenanza, hizo público ayer mismo un comunicado en el que reitera su posición, anuncia la presentación de cerca de ochenta alegaciones y mantiene su exigencia de suprimir de la ordenanza toda referencia a la prostitución y la mendicidad social.
A pesar de todo, fuentes socialistas se mostraron convencidas de que antes de que la comisión de Presidencia debata la aprobación inicial de la ordenanza, el acuerdo con ERC e ICV, e incluso con la oposición - preferentemente con CiU- será más que suficiente.
De momento, Portabella anunció algunas modificaciones que ya han sido aceptadas por el grupo mayoritario. Entre ellas figuran la supresión de la prohibición, y el correspondiente castigo a quienes vomiten en la calle, la prohibición genérica de distribución de octavillas o colocación de pancartas en los balcones y la obligación de que los organizadores de cualquier acto público en la calle depositen una fianza para cubrir los daños que pudieran cometerse. Este precepto se mantendrá, por ejemplo, para los promotores privados de conciertos al aire libre, pero no se aplicará a los organizadores de una manifestación.
Por lo que respecta a la mendicidad es muy probable que los socialistas acaben aceptando la introducción de modificaciones en el borrador inicial. La prohibición podría circunscribirse a la mendicidad "organizada, agresiva y violenta", lo que incluiría la persecución de los limpiavidrios.En cambio es casi seguro que de la ordenanza desaparecerá la posibilidad de que la Guardia Urbana obligue a las personas que ejercen las formas más clásicas de mendicidad a abandonar la calle contra su voluntad.
La regulación de la prostitución sigue siendo el mayor escollo para un acuerdo que difícilmente será total, ya que se puede dar el caso de que un grupo, aun votando afirmativamente la aprobación de la ordenanza en su conjunto, se abstenga o vote en contra de algún capítulo. ERC propone limitar la prohibición de la prostitución a aquellos lugares situados en una radio inferior de 200 metros de los centros escolares. Se trataría de aplicar una norma similar a la que rige la concesión de licencias para sex-shops. ERC también está de acuerdo en que no se tolere que prostitutas y clientes realicen actos sexuales en la calle.
En materia de prostitución y de mendicidad, con independencia de que se alcance o no un acuerdo, los tres grupos del gobierno, e incluso los de la oposición, coinciden en que más importante y efectivas que las prohibiciones - tajantes o con matizaciones- será reforzar los circuitos de atención social y reinserción laboral de quienes ejercen estas actividades.
