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Cuatro cuestiones de inconstitucionalidad mantienen en suspenso la aplicación de la norma gallega desde hace más de dos años y medio // El Parlamento de Galicia defiende su ley apelando al amparo de la familia desde el Derecho Civil propio
El Tribunal Constitucional (TC) admitió recientemente a trámite la última cuestión de inconstitucionalidad planteada por el Tribunal Superior de Xustiza de Galicia (TSXG) al respecto de la aplicación del Dereito Civil propio de la comunidad gallega en lo relativo a las parejas de hecho. Con esta, ya suman cuatro las dudas planteadas por el Alto Tribunal autonómico y elevadas al Constitucional sin haber obtenido respuesta alguna, de manera que las cuestiones en litigio referidas a recepciones de herencias o cobros de pensiones de alguno de los miembros de la pareja de hecho siguen en suspenso. Esta situación además se traduce en inseguridad jurídica para todos los gallegos que optan por este tipo de unión, equiparado al matrimonio a todos los efectos por el derecho propio de Galicia.
Al igual que en los tres casos anteriores –y más de dos años y medio después de que el TSXG decidió hacer la primera consulta al Constitucional–, el Alto Tribunal gallego duda sobre si la norma para regular las uniones matrimoniales en Galicia, que incluyó las parejas de hecho con idénticos derechos que los matrimonios, pueda suponer una invasión de las competencias del Estado.
Más información en El Correo Gallego (edición papel) y en Orbyt
El Tribunal Constitucional (TC) admitió recientemente a trámite la última cuestión de inconstitucionalidad planteada por el Tribunal Superior de Xustiza de Galicia (TSXG) al respecto de la aplicación del Dereito Civil propio de la comunidad gallega en lo relativo a las parejas de hecho. Con esta, ya suman cuatro las dudas planteadas por el Alto Tribunal autonómico y elevadas al Constitucional sin haber obtenido respuesta alguna, de manera que las cuestiones en litigio referidas a recepciones de herencias o cobros de pensiones de alguno de los miembros de la pareja de hecho siguen en suspenso. Esta situación además se traduce en inseguridad jurídica para todos los gallegos que optan por este tipo de unión, equiparado al matrimonio a todos los efectos por el derecho propio de Galicia.
Al igual que en los tres casos anteriores –y más de dos años y medio después de que el TSXG decidió hacer la primera consulta al Constitucional–, el Alto Tribunal gallego duda sobre si la norma para regular las uniones matrimoniales en Galicia, que incluyó las parejas de hecho con idénticos derechos que los matrimonios, pueda suponer una invasión de las competencias del Estado.
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