Dueño de notables recursos técnicos, el artista anglo-libanés tiene una biografía que viene muy a cuenta para explicar su estilo musical. Expatriado del Líbano a los nueve años, se refugió junto a su familia en París y luego en Londres. Como alumno, pasó por el Liceo Francés Charles de Gaulle, la Westminster School y el Royal College of Music. Una dislexia dificultó su integración, a tal extremo que llegó a tener serios problemas comunicativos. Las torturas a las cuales fue sometido por algunos compañeros de clase marcaron su carácter. A modo de terapia, su madre le hizo estudiar música con una rígida disciplina que, al parecer, surtió buenos efectos.
Desde pequeño tenía claro que quería dedicarse a la música y tras varios intentos parece que le ha llegado su momento. Según sus propias palabras, fue rechazado durante años por ser demasiado melódico para la escena indie y demasiado raro para la escena comercial. Mika declara que ha crecido escuchando de todo, de Joan Baez o Dylan hasta Serge Gaingsbourg o flamenco y que admira a los grandes compositores como Harry Nilson, Prince o Elton John, capaces de hacer grandes discos con una visión propia.
La excentricidad que demostró durante su adolescencia y su vida, ha despertado las suspicacias respecto a su sexualidad, pero el artista se mantiene fiel a sus convicciones, y al ser entrevistado por el canal de TV Gay “Logo”, su afirmación fue categórica: "los artistas gays no tienen la obligación social de estar fuera del armario".
Su disco debut “Life in Cartoon Motion” (2007) es el resultado de varios rechazos a los que se vio expuesto, es así como evidencia en una entrevista: las razones por las que los sellos independientes rechazaron sus melodías y las grandes compañías no terminaron de confiar en sus rarezas.
Una vez superadas las reticencias, Mika ha ingresado con paso firme en el negocio del espectáculo. La cordialidad de su música y lo espectacular de sus resultados justifican que se haya convertido en un producto mediático. No es casualidad que el diseñador Paul Smith cuente con él como imagen de su compañía de modas. En esto, por cierto, nuestro joven cantautor también sigue las huellas de Freddie.
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