La Conferencia Episcopal Ecuatoriana, tiene nuevos dirigentes, y sorprendentemente han cambiado su postura frente a las uniones de personas del mismo sexo. En efecto el pasado 25 de abril los obispos, Antonio Arregui y Víctor Corral, explicaron en la sede de la Asamblea Constituyente, que la jerarquía católica está de acuerdo con el reconocimiento de las uniones estables sin importar el sexo o la orientación sexual de las personas, con lo cual anunciaron que no se opondrían al reconocimiento legal de las parejas del mismo sexo, pero aclararon que esta nueva postura no implicaba que aceptarán la práctica homosexual al interior de su feligresía, según lo informado por un cable de la agencia EFE.

Los obispos expresaron también que: "Es sólida (…) la distinción entre el régimen jurídico que la sociedad impone y el régimen moral que guía las conciencias", con lo cual implícitamente reconocían la separación entre las políticas estatales y las creencias morales basadas en ideas religiosas. Además los obispos agregaron que: "toda persona humana es respetable, sea cual sea su orientación sexual", con lo cual tomaron distancia de las posturas de los grupos conservadores y fundamentalistas. La nueva postura fue saludada por los constituyentes del partido mayoritario “Acuerdo País”, los cuales están impulsando un proceso de un mayor reconocimiento de los derechos sexuales, en cambio, los representantes de la oposición socialcristiana (minoritaria), se mostraron sorprendidos y en desacuerdo con las declaraciones de la nueva jerarquía católica.